El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visitó este jueves a policías, Guardia Nacional y agentes federales desplegados en Washington. Lo hizo en medio de la intervención federal contra el crimen que declaró hace diez días en la capital.
En las instalaciones de la Policía de los Parques, en Anacostia, Trump agradeció a los efectivos por su labor y aseguró que la ciudad “ya es un lugar diferente” y “mucho más segura” tras el despliegue de casi 2.000 miembros de la Guardia Nacional.
El mandatario republicano estuvo acompañado de la fiscal general Pam Bondi y su jefa de gabinete Susie Wiles. En ese sentido, destacó que la operación es “un éxito” y prometió que Washington se transformará en “la mejor capital del mundo”.
Además, el presidente adelantó que pedirá al Congreso fondos para proyectos de embellecimiento urbano, que incluyen repavimentación de calles, retiro de grafitis y mejoras en parques y áreas verdes.
En un gesto simbólico, Trump llegó cargando cajas de hamburguesas y pizzas para compartir con los agentes y soldados desplegados, reiterando su agradecimiento por “proteger a los ciudadanos de D.C.”. Aunque había anunciado que saldría de patrulla con la policía y la Guardia Nacional durante la noche, finalmente esa actividad no se concretó.
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